Un estudio reciente de la Universidad de Surrey ha revelado que modificar la forma en que los hoteles presentan sus menús puede tener un impacto significativo en la reducción de emisiones de carbono. La clave está en priorizar opciones vegetarianas y plant-based mediante estrategias de comportamiento que influyan en las decisiones de los comensales.
El poder de los menús sostenibles
Los hoteles pueden disminuir su huella ambiental al rediseñar sus menús para que las opciones vegetarianas sean la primera elección disponible. Esta estrategia, conocida como “nudge” o empujón conductual, guía a los clientes hacia decisiones más sostenibles sin imponer restricciones. Al aplicar técnicas de encuadre y anclaje, como destacar platos sin carne como las opciones más atractivas o populares, se ha demostrado que los huéspedes están más inclinados a elegir alternativas con menor impacto ambiental.
Resultados del estudio
La investigación, publicada en Sustainable Tourism, se llevó a cabo en dos restaurantes de hoteles, donde se probaron distintos enfoques en 647 participantes. Se compararon menús tradicionales con versiones modificadas que incluían intervenciones como:
- Destacar los platillos vegetarianos como la primera opción.
- Usar descripciones más atractivas y sugerentes para platos sin carne.
- Aplicar el efecto de arrastre (bandwagon effect), sugiriendo que más personas optan por elecciones sostenibles.
Los resultados fueron contundentes: los cambios en el diseño del menú lograron un aumento significativo en los pedidos de opciones vegetarianas, demostrando que los estímulos conductuales funcionan mejor que los mensajes cognitivos tradicionales.
Un paso clave hacia la sostenibilidad en la industria hotelera
Con una creciente demanda de opciones sostenibles y un mayor interés por reducir la huella de carbono en la alimentación, la industria hotelera tiene la oportunidad de liderar el cambio con ajustes sencillos pero impactantes. Al ofrecer menús que prioricen alternativas plant-based y aplicar estrategias de comportamiento, los hoteles pueden contribuir activamente a la lucha contra el cambio climático sin comprometer la experiencia gastronómica de sus huéspedes.
Este estudio refuerza la importancia de integrar prácticas ecológicas en la hospitalidad, mostrando que pequeñas decisiones pueden generar grandes resultados en la reducción de emisiones y en la promoción de hábitos más sostenibles a nivel global.